
El 30 de abril fue declarado el Día del Trabajador Rural por la Ley N°19.000 del año 2012 como feriado no laborable pago para los trabajadores que desempeñan esa actividad. Canelones es el departamento con mayor número de trabajadores y trabajadoras dependientes en el sector rural. Cerca de 18.000 asalariados y asalariadas rurales se dividen en una diversidad de rubros: horti-fruticultura, ganadería, avicultura y vitivinicultura, entre otros, lo que representa el 15 % del total de la población asalariada rural del país.
La Agencia de Desarrollo Rural de la Intendencia de Canelones viene desarrollando una serie de acciones con el objetivo de visibilizar y valorizar las tareas realizadas por los asalariados y promover la efectiva realización de sus derechos, tanto en lo que respecta a las condiciones de trabajo como al fortalecimiento de sus organizaciones sindicales, reconociendo su aporte a la generación de riqueza y la importancia del desarrollo y la mejora de los sistemas productivos rurales.
Derechos laborales
En materia laboral, la Ley N° 18.441 del año 2008 reivindica derechos fundamentales de los trabajadores rurales asalariados: la ley de ocho horas, la negociación colectiva, la sindicalización, el aguinaldo, el salario vacacional, la salud y la seguridad; otorgando, por ejemplo, el derecho a horas extra. Mientras que para el resto de los trabajadores esta condición ya regía desde 1915, para los trabajadores rurales rige recién a partir de 2008.
Trabajadoras rurales: el lugar de las mujeres
Las mujeres que viven y trabajan en el campo, además de enfrentar inequidades de género, son sujeto de otras desigualdades que tienen que ver con condiciones económicas, sociales y de ubicación territorial. El enfoque de derechos con que la Intendencia aborda el tema de las ruralidades plantea una mirada centrada en las personas. En este sentido, el Gobierno de Canelones ha desarrollado diversas acciones con el objetivo de jerarquizar y hacer visible el lugar de las mujeres en las comunidades rurales e intervenir estratégicamente de cara a la igualdad de género en contextos de ruralidad, promoviendo también la valorización del tiempo de ocio y su relación con el tiempo dedicado a las responsabilidades que se asumen a nivel familiar, productivo y comunitario.
Identidad y desarrollo
Los habitantes de Canelones tenemos todos una conexión con las y los trabajadores rurales, tenemos un pedacito del campo en nuestra casa a través de los alimentos que consumimos. El campo y la producción familiar han sido siempre un motor económico para nuestro departamento.
La Intendencia de Canelones aborda la realidad del trabajo rural a través de una mirada integral, con un fuerte componente sociocultural en el que la identidad rural canaria es un capital intangible fundamental para el desarrollo del departamento y para caminar, desde ese lugar, hacia el futuro.