Martín Aquino (1889 - 1917)

Ponciano Martín Aquino nació en la Rambla, lugar donde el arroyo Vejigas desagua en el río Santa Lucía. Era hijo natural de Francisca Aquino, viuda de Fabián Pinela, de quien tuvo un hijo, Gregorio Pinela, medio hermano y compañero de correrías de Martín. Su padre fue un estanciero casado de Treinta y Tres, de apellido Sánchez, con quién Francisca había tenido ya dos hijos, Regina y Emiliano. El bautismo de Martín se celebró en la Parroquia del Santísimo Salvador de Tala el 17 de abril de 1890.

Los sentimientos y la valoración que despertó en los sectores menos favorecidos de la campaña hicieron de él un personaje legendario. Surgió en la modernización, en los albores de los que Barrán califica como una “sociedad civilizada”. Es conocido también como el último de los matreros, tradicionales personajes rurales que vivían al margen de la ley y fueron el producto de la desocupación que trajo como consecuencia el alambramiento de los campos.

Para utilizar el término de Hosbawn, podemos definirlo como un “bandido rural”, figura que aparece en las zonas rurales que comienzan a sentir las consecuencias de la modernización. Es la expresión del malestar que sienten las comunidades ante el desequilibrio que les generó la penetración del capitalismo. Aquino simboliza la resistencia a un sistema que se percibe como injusto y por este motivo el personaje cobra dimensiones heroicas.

Despertó una profunda simpatía entre los pobladores de la campaña que se solidarizaban con el matrero, ayudándolo a ocultarse de la policía. La camaradería de sus coterráneos le permitía moverse con libertad a plena luz del día y asistir a todo tipo de festividades.

Aquino se consagró como una leyenda popular y en el presente los vecinos que lo conocieron relatan con orgullo y cordialidad las circunstancias de su encuentro con el último de los matreros.

"Aquino fue generoso / cariñoso con su madre / del coraje no hizo alarde / y fue amigo bondadoso. / Nunca se mostró orgulloso / y se largó de matrero / para defender su cuero / él siempre solía decir: / peliar antes de morir / mi libertá es lo que quiero";
Fragmento de versos atribuidos a su amigo Roque Franco (Abella, 2009: 319)

Fuentes:
Abella, Martín Serrano 2009 Martín Aquino el matrero. Editorial Fin de Siglo. Uruguay.
Chumbita, Hugo 1995. Bandoleros santificados. Todo es Historia, Nº 340, noviembre Buenos Aires.