Con el objetivo de avanzar en seguridad y convivencia, y dando continuidad al buen relacionamiento y la mutua colaboración existente entre la Intendencia de Canelones y el Ministerio del Interior, se instalarán en el departamento 1.800 cámaras de videovigilancia, con un centro de monitoreo propio y cámara móviles.

La inversión para la compra e instalación del sistema se realiza con presupuesto propio de la Intendencia y ronda los dos millones de dólares. A su vez, se prevé que quede en funcionamiento durante el primer trimestre de 2023. Las instalaciones contarán con la más alta tecnología y se distribuirán en todo el departamento, en más de 150 puntos. Así lo explicó el Coordinador del Gabinete Institucional del Gobierno de Canelones, Pedro Irigoin, quien añadió que, para la instalación de este sistema de videovigilancia, se priorizarán los edificios municipales, espacios deportivos, culturales, parques, plazas, corredores y parques lineales en los 30 municipios del departamento.

Al mismo tiempo, se trabaja en un convenio para que la videovigilancia sea compartida y que ambas instituciones asuman las competencias correspondientes: la represión del delito corresponderá al Ministerio del Interior, mientras que los costos operativos, el mantenimiento e instalación del sistema será asumido por la comuna.

Este sistema también se instalará con el fin de avanzar hacia la consolidación de espacios seguros, que permitan mejorar la convivencia, y controlar posibles situaciones de violencia basada en género o violencia hacia a niños, niñas y adolescentes. Asimismo, se vigilarán puntos específicos con el objetivo de combatir el vandalismo y los basureros o depósitos de ramas no autorizados. “Seguimos avanzando en este trabajo y esperamos que rápidamente pase de ser un proyecto a un hecho real”, sentenció Irigoin.