La Comuna Canaria a través de la Dirección General de Desarrollo Social, Promoción y Prevención de Salud y del Centro Coordinador de Emergencia Departamental (CECOED) vienen realizando varias acciones de atención a las familias más vulnerables del departamento, en el marco del Plan Invierno.

La Directora de Desarrollo Social Prof. Gabriela Garrido informó que el Equipo Técnico Territorial viene intensificando las acciones por el frío polar. En este sentido explicó que desde la intendencia se llevan adelante varias estrategias; “la situación más preocupante son las familias con bebés menores de 6 meses y recién nacidos por la vulnerabilidad que tiene esta etapa de la vida ante una inclemencia de tiempo de este tipo”.

Recordemos que con estas familias se viene trabajando desde el Programa Canelones Crece Contigo con varias acciones, pero a veces no tienen las condiciones ideales para afrontar un frío de estas características. Ante esta situación el equipo Técnico de la Dirección de Desarrollo Social, según informó su directora general, está apoyando a 300 familias, pero no solo con alimentación y abrigo, sino también con supervisión y educación. Uno de los temas que preocupa a las autoridades es como se genera calor en esos hogares ya que muchas veces se prenden sistemas de calefacción que no son seguros, lo que puede provocar un incendio, otras de las preocupaciones es la situación de colecho de los recién nacidos. Ante estas situaciones el equipo técnico está abocado a la parte educativa y de prevención en estos días.

El testimonio de Daniela

Daniela Arbelo es una de las beneficiarias del Programa Canelones Crece Contigo, vive en Villa Foresti de Las Piedras junto a sus hijos: Matías de 15 años, Katherine de 14 años, Pablo de 9 años y Milagros de 10 meses. Está embarazada de su quinto hijo, otro varón, que llegará a fines del mes de noviembre.

Consultada acerca de cómo vienen sobrellevando la ola de frío Daniela dijo que gracias a la ayuda prestada desde la Comuna vienen atravesando las bajas temperaturas mucho mejor que en otros momentos ya que le han hecho llegar insumos a ella y sus hijos. “Me trajeron frazadas, alimentos para mi casa, abrigo para mi y los chiquilines”, dijo.

Daniela explicó que desde el programa de la Comuna también se les ha brindado asesoramiento respecto a las formas de calefacción. “Utilizamos estufa eléctrica durante el día, por la noche la apagamos por los incendios que han habido en otras casas. Mi casa es de costanero por lo que no quiero arriesgarme a perder todo. Nos han explicado cómo cuidar la calefacción, a no poner ropa a secar cerca, a cuidar la ubicación de las estufas, a no colocarlas cerca de maderas ni de alfombras, tampoco al alcance de los niños, en mi caso sobre todo cuidando que no esté al alcance de Milagros que ya camina”, dijo.

La beneficiaria del Programa Canelones Crece Contigo comentó además que en los primeros meses de este año la familia vio afectada su vivienda por una inundación, tras la cual desde el programa se les ayudó con colchones.

Destacó que además reciben un importante asesoramiento en distintas áreas. Contó que se la ha guiado respecto a los cuidados que debe mantener durante el embarazo que lleva en curso y también cuentan con el asesoramiento de una ginecóloga en el CAIF de la zona. “También recibimos apoyo psicológico tanto yo como mis hijos, nos orientan para que los chiquilines no estén en la calle, nos guían acerca de qué recursos tienen, a qué lugares pueden ir. Además como estoy con problemas económicos porque tengo que realizar reposo me hablaron sobre el comedor de INDA al que podía acceder”, añadió.

En todo momento se mostró muy contenta y agradecida por la ayuda recibida. “La verdad divino todo, siempre están pendientes de nuestras necesidades. Nunca pensé que me brindarían tanto apoyo”, concluyó.

Familias abren las puertas de su casa para recibir a técnicos de Canelones Crece Contigo

“Las familias están abriendo sus puertas porque están acostumbradas a que el equipo de Desarrollo Social, se preocupe por su situación, así que lo están tomando como una nueva manifestación de que estamos ahí, de superación y de salida de la situación de pobreza en la que vivimos”, afirmó Gabriela Garrido.

Otras de las acciones que se están implementando desde la Comuna son las recorridas nocturnas donde se le entrega ropa y alimentación a las personas que se encuentran en situación de calle. A pesar de que no es un número significativo en el departamento, se viene trabajando en coordinación con el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), el SINAE y con un equipo de la intendencia que está atendiendo la situación de calle en Pando y Las Piedras, trabajando en redes con el Ministerio del Interior, con ASSE, haciéndose las derivaciones necesarias a centros hospitalarios, a los centros de tratamiento en adicciones o refugios. Según explicó la Directora de Desarrollo Social “de las 60 personas en situación de calle sólo seis familias aceptaron ser conducidas a refugios, encontrándose con gran la resistencia de las demás personas a las que se le brinda, en cada recorrida, alimentación calórica y abrigo”. En los comedores se está reforzando la alimentación, brindando una ración doble.
Se recuerda por otra parte que las vías de comunicación son los teléfonos 43323934 int. 2013 ó 2014 en horario de oficina. En la noche se puede llamar al teléfono 43322288 desde donde se les derivará la solicitud. También se pueden dirigir a las oficinas de Desarrollo Social de los 29 municipios del departamento.

En la noche llega la brigada

La neblina fría de la noche, se mezclaba con el “humito” del guiso de arroz, que comenzó a recorrer las calles de Pando a las 20:30 horas. Al ver el auto azul que llegaba a la plaza, se abría el apetito de David, porque sabe que viene la cena.

El equipo de la Dirección General de Desarrollo Social, Promoción y Prevención de Salud, sale todas las noches a pesar del frío y la lluvia, a llevar la bandeja de guiso con arroz y verduras o polenta. También se entrega un vaso de cocoa con leche en polvo y pan para acompañar la comida.

Son pocos y se conocen, cada uno sabe sus mañas y costumbres, son cerca de 25 personas que cada noche reciben la comida y a veces incluso llevan ración doble cuando sobran alimentos.

Uno de los jóvenes que permanece frente a la plaza Constitución, recibe a la brigada y muy agradecido se apoya en una ventana a tomar la cocoa, sin escapar a las fotos. Otro veterano más reticente, se esconde atrás de un contenedor ubicado a una cuadra de la plaza, y acepta la comida con la condición de que sólo se acerquen los integrantes de la brigada, que ya son viejos conocidos.

Totalmente opuesto es el caso de Rodrigo, que para en las inmediaciones de las calles 18 de Julio y Piovene, quien se ofrece a posar para la foto, y muy contento muestra sus dos vasos de cocoa caliente. “¡Aguante la comuna!” le grita a los integrantes de la brigada y les agradece por la comida.

Diego tiene su campamento armado en Independencia y Artigas, está protegido del viento ya que sus cosas están ubicadas en la vereda frente a un carro de comidas. Pide dos platos porque está esperando a otro amigo que llegará más tarde, agradece, y se sienta en su silla blanca de plástico.

La brigada vuelve a la plaza Constitución, y encuentra a otro veterano sentado en el cordón de la vereda, frente a la sede del municipio conversando solo junto a su carro. La psicóloga se acerca y empiezan a conversar, y allí el encuentra un espacio para desahogarse unos minutos. Le cuenta como pasó estos días, y agarra su bandeja de comida. Se despide, la brigada sigue su camino, y el continúa conversando solo con su carro cargado de cosas que recolectó en el día.

Otros reciben la visita a domicilio, como es el caso de Javier y Roberto, quienes viven bajo una palmera al margen de la vía de tren. “Escondé la cámara que se va a romper” dice Javier, mientras sus dos perros se pelean por agarrar un pedazo de comida.

“Para ustedes no hay nada, no. Se quedan quietos” les dice Roberto a sus mascotas con total serenidad, mientras los perros buscan la forma de treparse y robarles el pan.

“Que no valla para la policía” dicen ambos al camarógrafo con sospecha, al ser filmados. Es una preocupación constante en todos los casos cuando ven que se acercan cámaras, pero luego que entran en confianza no hay problemas.

Los agradecimientos y el buen trato, también son factor común en todos los casos de estas personas que valoran el apoyo, y a pesar de los errores que cometan en su vida, actúan de forma educada con quienes cada noche les acercan un plato de comida caliente.