Se trataba de un espacio urbano degradado y vinculado a problemáticas socio ambientales que fue identificado como área de oportunidad. A través de su equipamiento se proyectó su transformación como centro de referencia de los barrios contiguos. Se reconoce su centralidad barrial denominada “PUEBLO NUEVO” como soporte territorial que impulse la necesaria integración de la ciudad y de sus barrios. Se desarrollaron intervenciones puntuales en espacios ya reconocidos por los habitantes, con posibilidades de desarrollo y crecimiento, articulando acciones que consolidaran un área de servicios, de integración social e identificación para la zona.
En una primera etapa las obras comprendieron: entubado de cañada y construcción de centro de barrio. En una segunda etapa se dotó el espacio de equipamiento urbano (bancos,juegos, parrilleros, papeleras) y arborización. Como tercera etapa se construyó un circuito aeróbico de 400 m, iluminación general y cancha polifuncional. El objetivo principal de estos proyectos fue generar lugares de intercambio y disfrute contribuyendo, así, a la cohesión social y al fortalecimiento de las identidades locales.